La dependencia energética es la cantidad de fuentes primarias de energía que necesita un país para hacer frente a sus necesidades de consumo interno. Algunas de las fuentes primarias son el petróleo, el gas natural, el sol o el viento. La dependencia energética en España se debe primordialmente a la falta de petróleo y de gas natural en el territorio nacional.
La dependencia de los combustibles fósiles para la generación de energía eléctrica en nuestro país es todavía muy alta. Según el informe Atados de Greenpeace solamente el 13% de la energía en Europa proviene de fuentes renovables.
El grado de dependencia de España de las importaciones de energía, concretamente, fue del 74,96%, como muestra un estudio de Eurostat. Este dato es el más alto desde 2011 y quiere decir que el país importó tres cuartas partas de la energía consumida.
Consumo de energía primaria en España
El estudio Statistical Review of World Energy 2020 de la compañía británica BP, revela que en el año 2019 prácticamente el 50% del consumo de la energía primaria en España provino del petróleo y sus derivados, seguido en un 23% del gas natural. En ese mismo año, las energías renovables solo representaron el 13,11% del total.
Esto afecta directamente sobre la producción de gases de efecto invernadero para la producción de electricidad en nuestro país, que fue de más de 250 millones de toneladas de CO2. Nuestro país debe recurrir a fuentes no renovables externas, sobre todo, cuando se dan casos de picos de demanda y no se pueden cubrir con la generada internamente.
Los países desde los que España más importa fuentes primarias
El año 2020 fue el que menos toneladas de crudo se importaron desde el año 2011, en total 54.855 millones de toneladas. España solo es capaz de generar 27.537 toneladas por lo tanto su importación es indispensable. El ranking de los 10 países desde los que más se importó petróleo fueron:
- Nigeria: 10.840 millones de toneladas.
- México: 8.443 millones de toneladas.
- Arabia Saudí: 5.542 millones de toneladas.
- Kazajistán: 4.518 millones de toneladas.
- Irak: 3.505 millones de toneladas.
- Estados Unidos: 3.095 millones de toneladas.
- Brasil: 3.070 millones de toneladas.
- Libia: 1.967 millones de toneladas.
- Azerbaiyán: 1.771 millones de toneladas.
- Angola: 1.696 millones de toneladas.
El otro gran producto primario del cual depende la producción energética española es el gas natural. La producción española es de 642,2 GWh y el consumo es de 358.733 GWh. En estos datos contamos el consumo directo por los usuarios y el usado para la generación eléctrica. Para llegar a la cifra necesaria, los países desde los que más se exporta gas natural son los siguientes:
- Argelia: 106.205 GWh.
- Estados Unidos: 57.117 GWh.
- Nigeria: 44.195 GWh.
- Rusia: 38.081 GWh.
- Catar: 32.248 GWh.
- Trinidad y Tobago: 24.081 GWh.
- Francia: 22.227 GWh.
- Noruega: 18.130 GWh.
- Guinea Ecuatorial: 10.569 GWh.
- Angola: 4.056 GWh.
El futuro de la electricidad en España
En anteriores artículos ya comentamos los planes de España respecto a la responsabilidad energética y aumentar la energía renovable que se produce en nuestro país con el objetivo de cumplir con la Agenda 2030 y con los Compromisos de Glasgow. Sin embargo, a nivel de consumo de energías renovables como fuente primaria queda mucho que recorrer ya que solo representa el 13,11% y, recordemos, el petróleo prácticamente el 50%.
Una de las alternativas más viables y que más pueden ayudar a nuestro planeta es tomar conciencia y generar nuestra propia energía mediante la instalación de placas solares. El autoconsumo energético puede aplicarse a nuestra casa o a nuestras comunidades vecinales y gracias a que podemos devolver la energía sobrante a la red eléctrica también contribuimos a que otros hogares se abastezcan con energía limpia.
